Twitter response:

Categoría: Bioética

Arquitectura y Bioética
Arquitectura y Bioética

 

Autor: Lucía Sánchez Lovera

Si quieres alcanzar el prestigio profesional y la consideración de la demás obra de tal manera que no pierdas la estima de ti mismo –

“Augusto Vels”

¿Cómo podemos relacionar la arquitectura y la bioética?

Al escuchar la palabra arquitectura el primer pensamiento que se viene a la cabeza de muchos son edificios, pero el edificio no es más que un objeto para mejorar la calidad de vida del ser humano por eso es que la arquitectura es capaz de cambiar el mundo de mil maneras como, por ejemplo, creando hospitales y estaciones de bomberos para salvar vidas, o escuelas y bibliotecas para alimentar la mente, o parques y teatros para alegrar al corazón.

El primer tema de interés al hablar de bioética y arquitectura trata de como los arquitectos son los responsables de crear lugares que alimenten al ser humano en cuerpo y alma, pensando desde en la comodidad hasta en la seguridad, y es importante recordar que todas las personas merecen un hogar digno que los proteja de la naturaleza y de cualquier otro factor que amenace su salud o seguridad.

Al comenzar con un proyecto uno de los primeros pasos es elegir el terreno donde se construirá, muchas veces en estos terrenos ya existen arboles y naturaleza, y a su alrededor fauna, es responsabilidad del arquitecto con los conocimientos actuales cuidar de la naturaleza y construir de una manera sustentable, hay muchas maneras de llevar a cabo una edificación sustentable, ya sea cuidando los arboles respetándolos y construyendo a su alrededor o trasplantando, o en un caso sin más opción talando y reforestando, también es importante tomar en cuenta los nuevos sistemas como recolección de aguas pluviales, paneles solares, etc.

Por último, uno de los temas más importantes en relación con la bioética y arquitectura es el proceso de edificación,  a la hora de construir un edificio se llevan a cabo muchos procesos, desde la proyección de planos, donde hay que calcular donde irán las columnas, que muros serán de carga, etc. , hasta la hora de llevar a cabo la construcción, durante todos esos procesos el arquitecto junto con todo un equipo de personas que desempeñan un papel muy importante(albañiles, ingenieros, peritos, etc.)deberán ser sumamente responsables en la supervisión de obra y materiales y en el calculo de cimentación para que en caso de terremotos el edificio se comporte de la manera correcta y no existan derrumbes que provoquen muertes o heridos.

El arquitecto tiene la capacidad de llevar a cabo sus sueños a la vida real, junto con este regalo lleva una responsabilidad muy grande, que es la de cuidar al hombre construyendo lugares seguros y habitables y de ahí es donde viene la relación de la bioética con la arquitectura, ya que ambas tienen el interés y el deber de cuidar la vida y la dignidad de las personas.

Bebé por Diseño
Bebé por Diseño

Antes de comenzar a explicar un tema de mucha controversia e importancia como lo es éste, es preciso mencionar el significado que se le da a las palabras “bebés por diseño o bebés diseño”. El término “bebés por diseño” actualmente hace referencia a técnicas reproductivas que incluyen la participación de procedimientos en donde se abre la posibilidad de que quienes tenga el deseo de concebir a un bebé, puedan por ende, seleccionar el sexo del mismo además de evitar el nacimiento de niños con enfermedades. De igual forma se puede apreciar que dicho vocablo se emplea para designar a un bebé cuyo genotipo representaría la participación de técnicas reproductivas. De acuerdo al Diccionario Oxford, se le define como “un bebe cuyo complemente genético ha sido artificialmente seleccionado a través de la ingeniería genética en combinación con la fertilización in vitro para asegurar la presencia o la ausencia de genes o características particulares”.

Claramente, al tener conocimiento de dicho tema, se puede agregar que su producción conlleva problemas tanto médicos, como legales y éticos. Por un lado, la modificación que se realiza en los genes de la persona plantea cierta problemática conforme a los derechos que el bebé tiene. Se podría decir que más de la mitad de la población opina que se está alterando el orden o el porvenir de la naturaleza, y el otro porcentaje restante estaría de acuerdo. Sin embargo, uno de los aspectos es que como tal, el embrión tiene el total derecho de permanecer libre de dichas modificaciones, por lo que se estaría produciendo una modificación genética si este se ve alterado, y por tanto, el bebé cambiaría para siempre. Por otro lado, en contraposición con lo anteriormente dicho, quien afirma que los papas son quienes están a cargo de los derechos de su hijo no nacido, se podría decir que ciertamente son quienes deberían tener la posibilidad de alterar sus genes, viendo siempre por el bienestar de su descendiente.

Cualquiera de los dos puntos de vista previamente mencionados que sean seleccionados, deberá de tener en cuenta la cuestión de si es o no cierto que la modificación genética realizada antes del nacimiento puede ser substituida a través de terapias que hoy en día se tienen gracias a los avances médicos que ha logrado el mundo de la ciencia y primordialmente el Diagnóstico Genético Preimplantatorio (DGP).

Sin duda alguna, la parte ética, ya sea negativa o positiva se puede involucrar dentro de nuestra discusión, ya que es de suma importancia considerar la reflexión ética del desarrollo de bebés por diseño. Ya que ahora se tiene la incógnita de si todos aquellos niños nacidos bajo esa causa, se consideran o no de diseño, entre muchas otras controversias más.

Gilbert Hottois afirmaba que la tecnología actual trastorna, hace estallar física y conceptualmente el mundo y el orden llamado natural, puesto que lo vivo existente en nuestra sociedad se maneja para la creación de otros seres vivos sin lo mismo que conlleva uno “normal” por así decirlo. Por lo que a partir de ello, se han generado nuevos problemas en donde la ética tiene un papel preponderante en relación a lo que se estudia. Para entender de manera precisa, es necesario expresar que hace más de 20 años comenzaron a surgir nuevas tecnologías que abrieron la puerta para la reproducción artificial, así como la existencia de la Tesis de Sandel, que dice que el verdadero dilema moral se encuentra sujeto a la manipulación genética y a la intención que se tenga, ya sea con fines médicos, físicos o intelectuales.

Al día de hoy existen controversias tanto morales como éticas muy desafiantes acerca de la legalidad o licencia que nuestro tema conlleva y que conciernen a un extracto de la sociedad. De igual forma, los medios de comunicación opinan que aproximadamente de 30 a 50 niños nacen por medio de la combinación de la técnica de reproducción asistida y de la DPG, en donde en países como Estados Unidos, Italia, Francia y España, la ley lo permite, opuesto a las ideologías permanentes y a los límites establecidos por Inglaterra.

Concluimos en que dicha técnica debería de esperar un poco más para su total aplicación, puesto que no se tiene la certeza o la seguridad de que a largo plazo afecte al bebé, basándose en que es difícil controlar el número de células que se van a modificar y por consecuencia, los cambios que va a arrastrar el bebé o a sus siguientes generaciones.

Autor: Valeria Casas Martínez

Desenmascarar el verdadero problema
Desenmascarar el verdadero problema

Un tema muy polémico es la legalización del aborto. Con la entrada del nuevo gobierno muchas personas “pro vida” tienen como preocupación la despenalización del aborto a nivel nacional, de igual manera muchas personas “pro-choice” apoyan esta nueva iniciativa. Es verdad que el aborto es un problema muy controversial a nivel mundial. Pero la problemática del aborto no se va a resolver tomando una postura, sino abarcando el problema desde la raíz.

El aborto es la salida más difícil dentro de un embarazo no deseado, y la que es pintada como la más fácil.  En México el número de reincidencia por aborto es más que el doble de lugares como Madrid, y mucho más alto que lugares como Nueva York. Lo que nos lleva a la pregunta si el aborto era la solución ¿porque las mujeres lo vuelven a hacer? ¿Realmente se está atacando la verdadera problemática? O es solo un tratamiento para ocultar lo síntomas de la verdadera problemática?

El  tema del aborto y los argumentos a favor de éste, han enmascarado las razones con las que se peleó su legislación: Mortalidad materna, violación y clínicas clandestinas. Sacando de la jugada la verdad detrás de estos problemas, y con ella las verdaderas soluciones: salud pública, mayor seguridad y clausura de centros de salud sin certificación.

Empecemos con la mortalidad materna, en México las principales causas de mortalidad materna, se relacionan con presión alta, sangrado e infecciones.

Para disminuir la mortalidad materna, no es necesaria la legislación del aborto, sino  el mejorar los centros de salud, la capacitación del personal y encargarse que el servicio esté al alcance de toda mujer.

Luego hablemos de violación, en México hay 99 personas al día que sufren abuso sexual. La mujer que es violada, no tiene que plantearse como solución la opción de abortar. sino terminar con el abuso. Con una tasa tan alta de reincidencia en nuestro país, se puede sospechar que la mujer que regresa a la clínica abortiva, sufre de un abuso sexual constante.

Para proteger a las mujeres de violación, la solución no es abortar sino meter a la cárcel a los violadores y mejorar la seguridad del país.

Por último, las clínicas clandestinas. En la ciudad de México el aborto ya fue despenalizado y, sin embargo, no existe nadie que regule las clínicas de aborto y que cumplan con las políticas sanitarias.

Si realmente se quiere evitar las clínicas clandestinas, la solución no es despenalizar el aborto, sino cerrar todas las clínicas clandestinas del País.

Es muy fácil tomar una postura frente al tema de la despenalización del aborto, sin embargo lo que es un verdadero reto y lo que realmente va a marcar la diferencia no es la legislación de una ley, sino voltear a ver a la mujer que ha tenido que llegar a ese dilema. Investigar y averiguar cuáles fueron las razones que la llevaron a estar en esa decisión y darle soluciones que ataquen el problema, no al embarazo.

Creo que el tema del aborto no debería ser una guerra ideológica, sino más bien una guerra en contra de una mentira, porque al desenmascarar las cosas vemos que el aborto simplemente es una idea que se vende como la solución, de un problema mucho más grande. La mujer que aborta puede estar cruzando con abusos sexuales constantes, con problemas de abandono, falta de recursos y falta de atención en centros de salud. ¿El término de su embarazo realmente va a solucionar esa problemática?

La verdad es que la solución no va ser invitar a la mujer que se deshaga de su hijo de 12 semanas, sino voltearla a ver y preguntarle ¿Por qué?  Para que de esa manera se resuelvan de raíz los problemas en México, con acciones que protejan la calidad de vida de la mujer y del bebé en camino.

Autores: María José Mier y Terán Guevara

La diferencia y relación entre Ética y Bioética
La diferencia y relación entre Ética y Bioética

Lorena Malpica Hernández

A menudo nos preguntamos qué diferencia existe entre los vocablos Ética y Bioética. La verdad es que es un binomio inseparable, sin embargo comencemos estableciendo las diferencias:
La palabra Ética, viene de “Ethos” que significa costumbre, antiguamente la palabra Ética se usaba para designar el “Hogar” o “Techo que nos cobija” y mucho se dice que ahora con la crisis de valores, el hombre se encuentra en la intemperie, por lo que surge la necesidad de retomar la Ética en nuestros días.

Para el autor Ricardo Sada, la Ética, es una disciplina de la Filosofía, es una ciencia que a la luz de la razón, juzga la moralidad de los actos humanos (aquéllos en los que interviene la inteligencia y voluntad del ser humano). Para otros autores, la Ética es una reflexión crítica sobre la moralidad de las ideas, valores y costumbres que rigen en una época determinada.

Para Santo Tomás de Aquino el primer principio del obrar humano es el de sindéresis: “Haz el bien y evita el mal” y de ahí se desprenden todos los demás principios éticos como la regla de oro: “No hagas a otros lo que no quieres que te hagan a ti”.

Por su parte, la Bioética para algunos autores es una multidisciplina que regula la conducta humana en el ámbito de la vida y de la salud, pero en realidad, se puede afirmar de manera sencilla, que la Bioética, es la Ética aplicada a todos los aspectos de la vida.

Y como afirmaba Aristóteles en su libro de “Ética A Nicómaco”, lo importante no es saber que es la Ética, sino que hay que aprender a ser éticos, viviendo los valores y cultivando las virtudes, para, así como decía Sócrates, alcanzar nuestro fin último: la Felicidad.

Por lo tanto, podemos concluir que, si vivimos la Ética, a través de la Bioética, viviremos tranquilos espiritualmente y felices lo que nos hará ser mejores personas cada día.

La bioética y la toma de decisiones difíciles
La bioética y la toma de decisiones difíciles

Dora García Fernández

Los seres humanos tenemos necesidades, intereses y opiniones distintas uno del otro, pero existe un momento en el que debemos decidir sobre dilemas que se nos presentan en la vida, la dignidad, la salud y el medio ambiente y se requiere de cierta orientación para la toma de decisiones. Es aquí donde entra la bioética para apoyar y orientarnos en estas situaciones, y sin lugar a duda, el tema central de la bioética es y siempre será la persona humana.

La bioética es la ética aplicada a todos los aspectos de la vida y por ello la importancia de que todos la conozcamos.  Se afirma que fue Van Rensselaer Potter, bioquímico y oncólogo estadounidense, quien en 1970 quien utilizó por primera vez la palabra “bioética” y le dio el sentido de aplicación como nueva disciplina, aunque recientes investigaciones afirman que en 1927 Fritz Jahr, teólogo y filósofo alemán ya había acuñado la palabra en uno de sus artículos. De cualquier forma es un área del conocimiento que vio la luz en el siglo pasado, lo que la convierte en una disciplina relativamente nueva. Y más que una disciplina, lo correcto sería hablar de una multidisciplina, ya que se compone de conocimientos de tres áreas, principalmente: derecho, medicina y filosofía.

En la vida diaria se nos pueden presentan diversos cuestionamientos y dilemas éticos, como, por ejemplo:

¿En caso de peligro se debe salvar la vida de la madre o la del bebé?

¿Debo permitir desconectar la máquina que mantiene vivo a mi ser querido o debo dejarlo seguir viviendo?

¿Debo respetar los deseos de un ser querido en etapa terminal o aceptar o rechazar los tratamientos invasivos cuando está en juego su vida? Pero, si su enfermedad ya no tiene remedio, ¿vale la pena seguir permitiendo que lo entuben y lo conecten a aparatos para mantener su vida artificialmente?

¿Firmo o no el consentimiento informado que me está dando mi médico?

¿Tener un hijo es un derecho o un don? ¿Debo acudir a las técnicas de reproducción asistida si no he podido tener un hijo?

¿Se vale dejar embriones congelados? ¿Son personas estos embriones?

¿Debo respetar la dignidad de mis empleados por encima de mis propios intereses

¿Se deben proteger las especies en peligro de extinción aun cuando esos animales alimentan a una población sin recursos?

Y así podríamos seguir indefinidamente… La bioética y sus principios nos pueden ayudar a encontrar respuestas a estos interrogantes y nos orientarán en  la toma de difíciles decisiones.

Así mismo podemos acercarnos a los bioeticistas quienes son especialistas en la materia que podrán ayudarnos en estos casos.

Cuidando al cuidador: El desgaste de quien cuida a un enfermo
Cuidando al cuidador: El desgaste de quien cuida a un enfermo

Las personas que dedican su tiempo y su vida al cuidado de un enfermo, además de tener mucha paciencia y fortaleza, requieren llevar a cabo una serie de recomendaciones para su cuidado personal, ya que el cuidador primario, como se le conoce a la persona que se hace cargo directamente de un enfermo por largos periodos de tiempo, puede presentar lo que se llama desgaste del cuidador y es por ellos que decimos que “también hay que cuidar al cuidador”.

¿Quién es el cuidador primario?

El cuidador primario por lo general es un familiar cercano, hijos, esposos, hijos políticos, suegros, aunque también encontramos en ocasiones compadres, o amigos.

También hay quienes sin ser familiares se dedican por amor al servicio, a cuidar a aquellos que requieren ser acompañados a lo largo de alguna enfermedad y requieren cuidados especiales pero sobre todo, atención personal, cercanía y tiempo, lo que se conoce como el “acompañamiento”.

¿Cuáles son algunos síntomas del cansancio o desgaste del cuidador?

Primeramente encontramos cansancio físico, ya que las horas que se invierte en el paciente son muchas, pues en ocasiones hay que moverlos, cambiarles ropa o pañales,  darles de comer, bañarlos, acostarlos, checar medicamentos, platicarles, escucharlos tanto en sus quejas dolorosas como en sus momentos de tranquilidad, etc. Y todo esto trae como consecuencia agotamiento físico.

Con el paso del tiempo, estos cuidados se pueden volver muy rutinarios, como lo es en el caso de pacientes con enfermedades incurables y progresivas, es decir, las que van en aumento lejos de mejorar, o bien los padecimientos que son muy largos de sanar o bien la atención del adulto mayor que dada su edad, implica mucha atención.

También desgasta al cuidador primario el hecho de ser criticado o juzgado en su estilo de atención o en las decisiones que toma para el paciente, por lo que se recomienda que la mayoría de las decisiones que se tomen al respecto sean de la aceptación de todos, o por lo menos de la mayoría.

Para el cuidador resulta un gran aliciente el hecho de que se le reconozca en su labor de cuidador, ya que como la mayoría de las veces lo hace por amor al paciente, le vienen muy bien los “apapachos” y agradecimientos por su entrega, porque aunque nos han metido mucho en la cabeza la frase de “hay que dar sin esperar recibir”, la realidad es que las emociones no son tan racionales y a todos nos cae muy bien el reconocimiento a nuestro esfuerzo, y esto en todos los ámbitos de nuestra vida. Así pues al reconocer se traduce en un estímulo y el cuidador con esto “cargará la pila” para continuar su ardua labor.

¿Qué actividades son recomendables para evitar el desgaste en el cuidador y del paciente?

Es muy importante tomar en cuenta los siguientes puntos para evitar más desgaste:

  1. Cuidar la alimentación, de preferencia ingerir alimentos sanos y tres veces al día.
  2. Procurar actividades de esparcimiento tales como entretenimientos, paseos, pequeñas reuniones, caminatas, con la finalidad de cambiar de ambiente y distraerse, así, al regresar a la rutina, se hará más llevadero darle continuidad a las actividades.
  3. Procurar dentro de lo posible, no postergar los momentos de descanso ni de sueño pues ello ayuda a que el cuidador mantenga un estado de ánimo adecuado para la atención del paciente. De lo contrario el cuidador se puede encontrar fácilmente irritable y de mal humor.
  4. Si el cuidador sale de la casa u hospital en donde se encuentre el paciente para cambiar su actividad, es importante intentar en lo posible pensar en otras cosas y no continuar con la mente puesta al 100%en el paciente, ya que hay que recordar que la vida continua afuera.
  5. El ejercicio constituye además de una fuente de salud física, una gran ayuda emocional para el cuidador, ya que reduce el estrés y lo relaja y reanima.
  6. Tener espacios para la reflexión y la oración, de preferencia varias veces al día, para darle sentido a lo que se está viviendo.

Técnica para el reflejo de los sentimientos

Funciona muy bien la técnica del reflejo de sentimientos, para las ocasiones en las que el cuidador no sabe qué decir ante el dolor del paciente o sus dudas, y consiste en regresar la pregunta al paciente para explorar sus sentimientos y que éste los ordene adecuadamente. Por ejemplo: Si el paciente dice : “Tengo miedo”, no contestarle: “No te preocupes”. Con esa respuesta no lo estamos ayudando a que canalice su angustia, sino por el contrario será más útil decirle: “¿De qué tienes miedo?, para así ayudar al enfermo a que hable de sus miedos y revise mentalmente sus temores.

Recordar que el trabajo que realiza el cuidador es además de fundamental en la vida del paciente, el cumplimiento de una de las obras de misericordia más hermosas.

* Tanatologa y psicoterapeuta.  Autora de Fundación Cenyeliztli.

Unidos por la familia. www.cenyeliztli.org

Autor: Loli Fernández Morett*

La dignidad de la persona humana y la mentira en el discurso político
La dignidad de la persona humana y la mentira en el discurso político

DR. RAFAEL RIVERA MONTERO.
(rafael_rivemon@yahoo.com)

En la actualidad se han proclamado los derechos humanos en todos los órdenes. Sin embargo, sabemos que de manera cotidiana se atropellan los más elementales derechos y, entre tantas manifestaciones de violencia, nuestra sociedad sufre de la falta de respeto más común en nuestros días, que es la del intento del engaño y del engaño propiamente dicho.

Dentro de las causas más frecuentes por las que el hombre de hoy practica la MENTIRA es por el desconocimiento, olvido o tergiversación del conceptverao y noción de lo que es la PERSONA, cuya consecuencia es que los humanos perdemos valores y no respetamos la DIGNIDAD DE LA PERSONA HUMANA.

Lo peor de todo, es que en estos tiempos, existe la tendencia a evitar el valor del sentido de la VERACIDAD, tanto a nivel de reconocer su existencia como de aceptar que el hombre miente con mucha facilidad.

La MENTIRA está integrada por la inadecuación entre lo pensado y lo exteriorizado y además, la intención de engañar.

Nuestra realidad nos indica que la MENTIRA es muy utilizada en los diferentes ámbitos de la vida y la política no escapa a ella.

Lamentablemente, en ocasiones, el discurso político cada día va aumentando su contenido de falsedad, a tal grado que no es raro que se acerque al cinismo.

La VERACIDAD en el discurso político es un requisito indispensable para que la confianza exista y para que la convivencia social sea posible, en virtud de que todo hombre tiene el derecho a no ser engañado.

Si el discurso político está contaminado por la MENTIRA, es porque está oscura la noción de la VERACIDAD como consecuencia de la pérdida del concepto más fundamental del sentido del “bien” y del “mal”; lo cual es debido a que nuestra sociedad insiste en vivir con un relativismo ético, confundiendo la moralidad con la legalidad, cuyo común denominador es la pérdida del sentido de la DIGNIDAD DE LA PERSONA HUMANA, traducido ello en una gran falta de respeto a los semejantes anteponiéndose los intereses personales o de grupo.

Autor: Dr. Rafael Rivera Montero

La educación y preparación del bioeticista clínico.
La educación y preparación del bioeticista clínico.

Hasta hace unos cuantos años se creía que cualquier persona que concluía un grado de especialidad, maestría o doctorado en bioética estaba capacitado para insertarse en la dinámica hospitalaria y brindar una orientación respecto de cualquier condición clínica. De igual modo, en algunos sectores se ha propagado la idea de que en realidad, incluso, no se necesita contar con estudio de bioética para abordar dilemas éticos clínicos y emitir sugerencias, bastaría sólo contar con conocimientos de medicina o practicar dicha ciencia para conocer los cuestionamientos éticos más profundos que rondan en la mente del ser humano y brindar soluciones efectivas a los mismos.

Nada más alejado de la verdad, un bioeticista clínico requiere, cada vez más, de conocimientos, habilidades y aptitudes que le permitan no sólo conocer las aristas más importantes de los principales dilemas éticos en el ámbito de la salud sino saber abordar momentos de crisis, intervenir en tiempo y forma para prevenir futuros escenarios devastadores, escuchar, empatizar y lanzar preguntas pertinentes que desencadenen reflexiones críticas que orienten la toma de decisiones.

Dos puntos resultan relevantes entonces: el primero versa sobre el conocimiento que debe tener el bioeticista para enfrentarse a complejas problemáticas que comportan dilemas éticos igualmente complejos, por ello el bioeticista deberá ser una persona formada en temas de Bioética, capaz y pertinente para abordar los procesos difíciles de toma de decisión en el ámbito de la salud. No cualquiera podrá ser bioeticista clínico, de hecho, mucho ayuda formarse en Bioética pero –y este es el segundo punto a considerar- no es suficiente, se requiere una visión y conocimiento muy específico sobre esa “otra” Bioética que se hace en el hospital y en la cama del paciente y no ya sobre un escritorio y con casos impresos en papel. De aquí la necesidad apremiante de incluir, en los planes de estudio de los programas de maestría, bloques prácticos que permitan acercar al estudiante a la realidad compleja y caótica de un caso real. Así, la primera parte será formar teóricamente a los bioeticistas y la segunda desarrollar herramientas y habilidades que permitan un adecuado papel dentro de la presión y urgencia del ambiente hospitalario.

Pensar, por todo lo anterior, en el futuro de la bioética será pensar en la ya presente formación de los bioeticistas que apelan a tener injerencia en la vida de las personas, su preparación tendrá que ser de altísimo nivel sin importar si ya cuenta o no con conocimientos de alguna de las disciplinas que confirman a la bioética. Ni el médico por si sólo, ni el filósofo o abogado por el hecho de serlo pueden –ni deben- creer que son bioeticisas clínicos y adentrarse en un caso real sin la preparación, entrenamiento y habilidades necesarias. Los efectos de hacerlo serían iguales a dejar la construcción de un puente que conecte dos ciudades, a un profesional que no sabe de ingeniería ni de arquitectura.

La Bioética Clínica y, por ende, los bioeticistas clínicos, están llamados a transformar la realidad pero, por ello mismo, su compromiso y exigencia deben ser altos y rigurosos, debemos, por ende, empezar a pensar en crear planes o programas de entrenamiento para bioeticistas clínicos.

Autor: Dra. Ma. Elizabeth de los Rios Uriarte.

A propósito de dos de los argumentos a favor del aborto…
A propósito de dos de los argumentos a favor del aborto…

Mucho se ha discutido últimamente sobre este asunto, sobre todo por la reciente noticia de que el Senado argentino votó en contra del aborto. El ir y venir de los argumentos a favor y en contra del aborto me hicieron reflexionar más… Un tema sin duda muy controvertido en ese Argentina y por supuesto en México.

Una vida humana es una vida humana donde sea y como sea. Un embrión es una vida humana desde el momento de la concepción, no empezó siendo embrión de tortuga ni de perro ni fue un simple cúmulo de células o un tumor en el vientre de la madre. Desde el principio fue un ser humano único e irrepetible. Lo único que diferencia a un embrión, a un feto, un niño, un adulto y un adulto mayor es el tiempo, simplemente eso: TIEMPO. Desde su inicio son la misma persona con sus características únicas y especiales que los distinguen.

Sobre los argumentos que se esgrimen a favor del aborto hay dos que me llaman la atención por lo rebatibles que son…

  1. Se debe legalizar el aborto porque todo niño tiene derecho a ser deseado…

Argumento del todo absurdo. El desear o no desear a un niño no afecta en ningún momento su dignidad como persona. Se ha comprobado que un niño “no deseado” en un principio puede llegar con el tiempo a ser muy deseado y querido.  Además un niño no deseado por su madre biológica puede ser dado en adopción y ser amado y deseado por la persona o  familia que lo adopte. Por lo tanto, este no es un argumento contundente para permitir terminar con su vida.

  1. Se debe legalizar el aborto porque la mujer tiene derecho a decidir sobre su propio cuerpo…

Otro argumento muy absurdo. Da la casualidad que en un embarazo hay dos cuerpos y hay dos vidas. La madre, si, efectivamente tiene derecho sobre su cuerpo, pero no sobre el cuerpo de su hijo o hija.  Y dado que el embrión puede ser mujer, es decir, un ser humano del sexo femenino, obviamente en caso de aborto este embrión no podría ejercer ese “derecho” de decidir sobre su propio cuerpo, por lo que fácilmente podemos echar abajo este argumento que esgrimen con tanto ahínco las feministas y los proabortistas.

Sin duda, la única solución que da el aborto es la aniquilación de una vida. Por lo tanto, no hay argumento que valga para terminar con una vida humana. Ojalá que todos pudiéramos entender lo importante que es valorar y  cuidar la vida desde su inicio hasta su final, ojalá…

Autor: Dora García Fernández

¿Qué es y para qué sirve la Bioética Clínica?
¿Qué es y para qué sirve la Bioética Clínica?

¿Alguna vez has estado en una situación complicada de salud donde el médico te presenta varias opciones pero que cada una por su lado implica ciertos riesgos a considerar y no tienes los criterios necesarios para saber cuál es la mejor opción? En estos casos es donde entra la bioética clínica cuya función principal es brindar orientación, conocimiento e información respecto de los posibles cursos de acción en una situación de crisis de salud o ante alguna enfermedad.

Antes de continuar conviene aclarar que no se trata de decir qué es lo que se tiene que hacer desde el punto de vista médico y menos aún imponerle al paciente una determinada decisión sino más bien de acompañar a los involucrados, a saber, el médico, el paciente y su familia, a través del difícil proceso de ponderación de los beneficios y los riesgos implícitos en todas y cada una de las acciones que se presentan como posibles con el propósito de guiar y clarificar la toma de decisiones pero ésta le corresponderá, siempre, al paciente en ejercicio de su autonomía.

No es de extrañar entonces que en algunos países como en Estados Unidos le llamen también a la bioética clínica, “bioética en la cama del paciente” ya que precisamente la función del bioeticista será ahí, en la cama y cuarto del paciente, con él y su familia y en armonía con las decisiones del cuerpo médico.

Así, será el bioeticista clínico quien asista a los agentes mencionados a considerar y ponderar razones, a valorar factores biológicos, económicos, sociales, culturales, religiosos y hasta institucionales para que, una vez considerados y razonados se pueda elegir el mayor y mejor bien del paciente.

Conviene aclarar aquí la neutralidad de la Bioética Clínica ya que no se sitúa como defensor de ningún partido o persona involucrado sino que, justamente su función será observar, desde fuera y con objetividad, con metodología y rigurosidad, los hechos y sus variables y a plantear preguntas no contempladas antes pues su mirada es de carácter objetivo pero en búsqueda siempre del mayor bien para todos.

Resulta frecuente que el bioeticista clínico entre en ese mundo interior de los involucrados en el caso y tenga acceso a razones y motivaciones no enunciadas si quiera y con ello, tendrá que deliberar cuáles son los principales valores involucrados y señalarlos con el objetivo de brindar luz a los argumentos y fortalecer las decisiones.

La bioética clínica es tan necesaria como necesario resulta brindar información clara, veraz y oportuna para tomar decisiones, por ello debemos generar una cultura donde ésta sea vista como algo cotidiano a la que tanto los profesionales de la salud como los pacientes y sus familias tengan acceso en cualquier momento y bajo cualquier circunstancia.

La bioética clínica ayuda a construir pacientes más autónomos y libres, familias más unidas y profesionales de la salud más conscientes por ello es una rama de la Bioética que requiere ser difundida, estudiada y aplicada y especialmente para los bioeticistas les abre la posibilidad de lograr realmente una profesionalización de la Bioética y de que sus años de estudio puedan, verdaderamente, cambiar vidas humanas.

Autor: Dra. María Elizabeth de los Ríos Uriarte