Twitter response:

La importancia de la historia

¿Qué sería de cada uno de nosotros, si el pasado quedara en el olvido? La vida de la persona humana es un trayecto que si bien se construye cada día, también se enriquece con lo que ha venido pasando. Aprendemos y vamos poniendo “tabique a tabique” lo que somos.

Lo mismo ocurre con todos los seres humanos. Los acontecimientos que van ocurriendo y que afectan para bien y para mal van haciendo historia, la historia de la humanidad y de su pensamiento.

Todas las culturas, derivan de esa historia y del pensamiento de personas que han contribuido en su construcción, no por casualidad…son un camino trazado, cimentado, firme.
Es cierto que los avances científicos y tecnológicos contribuyen a que nos conozcamos mejor como especie y como personas y que esos conocimientos necesariamente deben provocar cambios. La cultura es tan dinámica como lo somos cada uno de nosotros.

No obstante, resulta poco serio pensar que esos avances aporten lo necesario para desacreditar todo lo aprendido a lo largo del tiempo, sobre todo lo que se refiere a quienes somos.

Muchas tendencias de pensamiento actuales, dejan de lado lo aprendido hasta ahora y proponen teorías “de vanguardia”, como decía Chesterton: “no tengas la mente tan abierta que se te caiga el cerebro”.
Esto resulta muy peligroso. Poniendo un simple ejemplo, es absurdo pensar que se aplique una nueva vacuna contra la Polio, cuando la actual ha erradicado la enfermedad de la faz de la tierra.

Es así que, tratándose de temas de vida, las decisiones bioéticas deben ser tomadas no solamente desde las actuales propuestas, sino desde una reflexión que considere lo que ha venido siendo y los argumentos que eventualmente pudieran cambiarlo, analizándolo a profundidad desde sus sustentos.

De este modo, pudiéramos comprobar fácilmente que el “pre embrión” no es sino un simple término semántico e ideológico que pretende justificar el aborto y que no goza de un sustento científico o antropológico que eche por la borda lo que hasta ahora la humanidad ha considerado.
Desacreditar nuestra historia y lo que hemos venido aprendiendo, sin bases serias, es tanto como desacreditarnos a nosotros mismos. Arrancar una porción de nosotros para “ser” alguien distinto. Un simple experimento de las postmodernidad, muy riesgoso.

Es así, benévolo lector, que en este día te invito a conocer y valorar lo que somos, desde la madurez del tiempo y la reflexión, antes de “comprar” innovadoras teorías o ideologías, que no son más que eso.
Te espero la próxima semana en El Rincón de la Vida, con un nuevo tema y una nueva invitación para conocer más sobre todo aquello que afecta la vida…nuestra vida.

MBPP