Un tema muy polémico es la legalización del aborto. Con la entrada del nuevo gobierno muchas personas “pro vida” tienen como preocupación la despenalización del aborto a nivel nacional, de igual manera muchas personas “pro-choice” apoyan esta nueva iniciativa. Es verdad que el aborto es un problema muy controversial a nivel mundial. Pero la problemática del aborto no se va a resolver tomando una postura, sino abarcando el problema desde la raíz.
El aborto es la salida más difícil dentro de un embarazo no deseado, y la que es pintada como la más fácil. En México el número de reincidencia por aborto es más que el doble de lugares como Madrid, y mucho más alto que lugares como Nueva York. Lo que nos lleva a la pregunta si el aborto era la solución ¿porque las mujeres lo vuelven a hacer? ¿Realmente se está atacando la verdadera problemática? O es solo un tratamiento para ocultar lo síntomas de la verdadera problemática?
El tema del aborto y los argumentos a favor de éste, han enmascarado las razones con las que se peleó su legislación: Mortalidad materna, violación y clínicas clandestinas. Sacando de la jugada la verdad detrás de estos problemas, y con ella las verdaderas soluciones: salud pública, mayor seguridad y clausura de centros de salud sin certificación.
Empecemos con la mortalidad materna, en México las principales causas de mortalidad materna, se relacionan con presión alta, sangrado e infecciones.
Para disminuir la mortalidad materna, no es necesaria la legislación del aborto, sino el mejorar los centros de salud, la capacitación del personal y encargarse que el servicio esté al alcance de toda mujer.
Luego hablemos de violación, en México hay 99 personas al día que sufren abuso sexual. La mujer que es violada, no tiene que plantearse como solución la opción de abortar. sino terminar con el abuso. Con una tasa tan alta de reincidencia en nuestro país, se puede sospechar que la mujer que regresa a la clínica abortiva, sufre de un abuso sexual constante.
Para proteger a las mujeres de violación, la solución no es abortar sino meter a la cárcel a los violadores y mejorar la seguridad del país.
Por último, las clínicas clandestinas. En la ciudad de México el aborto ya fue despenalizado y, sin embargo, no existe nadie que regule las clínicas de aborto y que cumplan con las políticas sanitarias.
Si realmente se quiere evitar las clínicas clandestinas, la solución no es despenalizar el aborto, sino cerrar todas las clínicas clandestinas del País.
Es muy fácil tomar una postura frente al tema de la despenalización del aborto, sin embargo lo que es un verdadero reto y lo que realmente va a marcar la diferencia no es la legislación de una ley, sino voltear a ver a la mujer que ha tenido que llegar a ese dilema. Investigar y averiguar cuáles fueron las razones que la llevaron a estar en esa decisión y darle soluciones que ataquen el problema, no al embarazo.
Creo que el tema del aborto no debería ser una guerra ideológica, sino más bien una guerra en contra de una mentira, porque al desenmascarar las cosas vemos que el aborto simplemente es una idea que se vende como la solución, de un problema mucho más grande. La mujer que aborta puede estar cruzando con abusos sexuales constantes, con problemas de abandono, falta de recursos y falta de atención en centros de salud. ¿El término de su embarazo realmente va a solucionar esa problemática?
La verdad es que la solución no va ser invitar a la mujer que se deshaga de su hijo de 12 semanas, sino voltearla a ver y preguntarle ¿Por qué? Para que de esa manera se resuelvan de raíz los problemas en México, con acciones que protejan la calidad de vida de la mujer y del bebé en camino.
Autores: María José Mier y Terán Guevara